Día de los Enamorados, más que chocolates y rosas
Ya en vísperas de este fecha, cabe recordar en un mundo en el que para muchos parece cada vez más difícil manifestar muestras de cariño. Aparece la oportunidad todos los años de demostrarle al ser querido lo mucho que representa en nuestra vida —algo que se debería hacer todos los días— ya sea en un aspecto amoroso hacia la pareja, de amistad o simplemente familiar.
La celebración de San Valentín o el día de los enamorados se remonta a muchos siglos atrás, en Roma. Valentín era un sacerdote que, hacia el siglo III, desafió al emperador Claudio II, quien decidió prohibir la celebración de matrimonios para los jóvenes ya que distraía a los soldados. El religioso lo consideró injusto y los casaba en secreto.
El Día de San Valentín es una celebración tradicional de muchos países que se ha ido implantando en todo el mundo a lo largo de los años. Principalmente en la que las parejas de enamorados expresan su amor y cariño. Se celebra el 14 de febrero, onomástico del santo.
Pero lo de hacer regalos como flores, chocolates o salir a cenar en San Valentín se inició en el siglo XX. Es por eso que se considera a San Valentín el patrón de los enamorados.
