Solución al CO2 por el camino de la tecnología blockchain
No podemos replicar tecnológicamente la biosfera. Si podemos colaborar con ella para restablecer la simbiosis entre la sociedad humana y el medioambiente. Integrando varias soluciones tecnológicas con un sistema de registro blockchain como elemento vertebrador.
El quid está en un diseño tecnológico con bajo coste de uso. Aparece en un conjunto de líneas investigación químico-industrial muy prometedoras. Sin embargo, en todas ellas dejábamos de lado la biosfera. Y esta lleva desempeñando el papel de ingeniero atmosférico y climático desde hace miles de millones de años. Tiene reputada capacidad para ello. Por ejemplo, fue ella la que creó el oxígeno que respiramos.
Contar con la biosfera se puede plantear como una necesidad de orden ético y estético. Somos sus inquilinos y es bella.
Además, la biosfera es un almacén de conocimiento genético (biodiversidad) fundamental tanto para su propia perpetuación como también, no lo olvidemos, para nuestra medicina y nuestra biotecnología.
Pero, más allá de estos, hay otro poderoso motivo.
La biosfera forma parte del complejo sistema del carbono planetario. Un sistema cuyo equilibrio mantiene el carbono atmosférico (carbono inorgánico, CO2) en niveles que son compatibles con la vida. Al menos, con la vida tal y como ha estado organizada durante las últimas decenas de millones de años. Vaya, desde mucho antes de que nosotros apareciésemos en escena, hace unos 300 mil años.
En ese sistema de equilibrios la biosfera cumple un papel importante como almacén de carbono, en forma de carbono orgánico (moléculas de hidratos de carbono que forman parte de todo que está vivo o es materia leñosa, como la madera).